Tal y como ha declarado la diputada nacionalista, “el pretexto era entrenar en lugares de relativa dificultad orográfica, hay otros lugares en España donde seguro serían bien recibidos y hasta admirados.En Euskadi quizás pueda entenderse un ejército profesional en misiones de paz en el extranjero, pero las actuaciones dentro se ven, como prepotente aviso de “aquí estamos” y crean alarma.”

Margarita Uria recordó que no se avisó a los Aytos., todo lo más algunos recibieron un fax de mera comunicación de “pasaremos por ahí entre el 24 y el 29” ni se acotaron zonas, despejaron población.

En pleno proceso de paz, largo, duro y difícil, ha declarado Uria “algunos intentamos conseguir un clima social sosegado.Actuaciones como las de la semana propiciadoras de enfrentamientos fueron para muchos inoportunas y provocadoras como le he dicho, y se perciben como amenaza bravucona.”